SURGIMIENTO DE NAZISMO, FASCISMO Y FALANGISMO.

Características	FASCISMO	NAZISMO
ORIGEN.	Se vincula con la crisis que azotó a Italia al final de la I guerra mundial. Alineada en el conflicto con Francia (Pese a que inicialmente pertenecía al otro bando) salió vencedora del conflicto, pero aquejada de serios problemas económicos, sociales y políticos que dieron lugar a una fuerte conflictividad.	El Partido Nazi celebro su primer congreso, para ese momento contaba con 20.000 militantes. En ese mismo año, se dio la invasión Franco-Belga de la región alemana del Ruhr, según para salvaguardar el pago de algunas partidas de reparación de guerra que Alemania había dejado de cumplir.
TOMA DEL PODER.	Dependio de tres fuerzas principales que comprendían el arco político a comienzos de la década de los 20: destacaba el Partido Popular Italiano, de ideología católica moderada, creado en 1919 por el Secretario de Acción Católica Luigi Sturzo y apoyado por el papa Benedicto XIV. Seguida de ésta en importancia está el Partido Socialista, sujeto a fuertes tensiones que terminaron con su ruptura en dos sectores. De los cuales, uno de ellos fue: el Partido Comunista, de carácter revolucionario integrado en la III Internacional en el cual se destaco uno de sus fundadores y pensador Antonio Gramsci. Y la cuarta fase que estuvo presente en la vida política italiana fue: el Partido Fascista, el cual surgió en 1921 de los "Fasci di Combattimento".	Este se dio en las elecciones del mes de mayo de 1930, donde los nazis tan solo tuvieron 12 escaños en el Parlamento, mientras que el la Izquierda obtuvo la victoria clara. Meses después, se produjo el Crac de la bolsa de Nueva York, el cual trajo dramáticas consecuencias para Alemania. Esta crisis económica y social, dio luz a los Nazis.
CAMPO POLÍTICO.	El régimen fascista suspendió los derechos políticos, y los sustituyó por una estructura que subordinaba la esencia y la iniciativa individuales al interés nacional. De esta manera, todo quedaba sujeto al Estado: "Todo en el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado" expresó Mussolini.	Adolf Hitler llevo acabo la acción política, la cual se materializo en la creación de un régimen totalitario, que elimino cualquier rastro de oposición del campo político y social.  Para esto, en un primer momento, se valió del juego político democrático complementado con el uso de violencia; y mas adelante, de la fuerza de una dictadura personalista, impuesta a través del empleo sistemático del terror.
CAMPO ECONÓMICO.	La Política Económica, subordinaba la iniciativa privada al interés general pero, en realidad, favoreció a la gran patronal y a los terratenientes. Potenció el crecimiento económico en torno a la industria pesada y las grandes empresas. En el campo agrario se fomento la autosuficiencia del país mediante la autarquía, para lo cual, se hizo necesario aumentar la producción y disminuir la dependencia del exterior.	La I Guerra Mundial supuso un importante descalabro económico para Alemania. Durante la posguerra, las dificultades fueron agravadas por el desembolso de fuertes sumas como reparación de Guerra a los vencedores. La hiperinflación, fue el principal problema con el que se enfrentó el Estado. Como consecuencias trajo al tejido económico y golpeó amplias capas de la sociedad, especialmente a asalariados, funcionarios, pequeños ahorradores y pensionistas. La situación mejoró a partir de 1924, pero, años más tarde, el crac de 1929 y sus consecuencias, hundieron de nuevo la economía alemana.
CAMPO SOCIAL.	La ley de Rocco de 1926 elimino los partidos y organizadores sindicales, a excepción de los de carácter fascista. De esa manera, se intentaba destruir la Lucha de clases y así, construir una sociedad donde reinase la armonía entre obreros y patronos. Se prohibieron los derechos laborales como la huelga (1927). En 1932, los agentes económicos (patronos y obreros) fueron encuadrados en 22 grandes corporaciones creadas según su actividad económica. Se instituyo una asistencia social que incorporó en ella ciertas medidas populares como el salario mínimo, la congelación de alquileres, ayudas a las familias numerosas para fomentar la natalidad, etc. En el ámbito laboral se creó una caja de seguros obligatorios para hacer frente a la enfermedad, la invalidez y la vejez.	El Nazismo mantuvo el capitalismo como sistema económico y social. Hitler se apoyó en los más grandes empresarios para ascender al poder, mientras que sobre la clase obrera recayó la tarea de construir la economía alemana, dañada tras la Gran Guerra y la crisis de 1929.
CAMPO IDEOLÓGICO.	El Estado fiscalizo todas las facetas del pensamiento, la información y la expresión. Desplegó una férrea vigilancia sobre la educación, a la que mando la misión de adoctrinamiento político de niños y jóvenes. A los docentes los transformaron en funcionarios transmisores de consignas políticas. Los libros escolares, encargados de divulgar una idea mitificada del régimen y su líder.	Hitler decía que había la existencia de dos razas, las superiores y las inferiores, donde los alemanes formaban parte de la primera, y los judíos eran degenerados y eran los culpables de la mayoría de las desgracias de Alemania, por tanto, eran las razas inferiores. El odio a los judíos existía en Europa desde hace siglos, pero los nazis llegaron a elevarlo a la máxima categoría.